Santo Domingo. – El mes pasado concluyó la licitación de urgencia (LPI-EDE-02-2021) para instalar 400 nuevos megavatios (400MW) al sistema eléctrico nacional. El proceso fue lanzado el primero de diciembre del 2021.
Dicha licitación fue declarada de urgencia a los fines de lograr que antes de octubre del presente año se inyecte energía al sistema de unidades generadoras medianas basadas en barcazas y, también, plantas modulares ya habilitadas para su rápida instalación en tierra, lo que sumaría hasta 400 megavatios.
Fruto de esa licitación las nuevas unidades generadoras comenzarán a instalarse y producir gradualmente a partir del próximo mes de junio, y tienen como fecha de término para alcanzar la producción máxima el próximo mes de octubre.
La urgencia se debe a que el parque de generación recibido en agosto del 2020 era claramente deficitario, puesto que si se abastecía la demanda máxima de energía la reserva que quedaba era menor del 5%, es decir, una capacidad tan exigua que cualquier salida por reparación o mantenimiento de una planta en período de verano se traduciría sin dudas en apagones por déficit de capacidad instalada disponible. Esa situación es una clara amenaza para el bienestar de la población y para la recuperación y crecimiento de la economía.
Esa situación había sido señalada en el año 2018 por un estudio encargado por la propia CDEEE a la firma argentina Mercados Energéticos, en el que se demostró la necesidad de instalar una central generadora de 600 MW basada en gas natural en el 2021 y otra también de 600 MW en el 2023. Además, el estudio indicaba que anualmente el país debía instalar 300 MW de energías renovables dividido en 150 MW solar y 150 MW eólica, estos detalles fueron ofrecidos por el ministro de Energía y Minas, Antonio Almonte.
Lamentablemente, el gobierno anterior, pese a conocer tan delicada situación no buscó ninguna solución ni ordenó las licitaciones pertinentes para instalar las generadoras de gas natural indicadas ni tampoco para las renovables.
Esa falta de reserva de generación ha sido la causa efectiva de los recientes apagones provocados por la salida de la generadora AES Andrés, para fines de reparación, y de Punta Catalina 1 para mantenimiento.
El presidente Luis Abinader, a pocos meses de llegar al poder ordenó la licitación LPI-EDES-01-2021, lanzada en febrero del 2021 para construir dos plantas de 400 MW cada una y una terminal para descarga y almacenamiento de gas natural en la costa de Manzanillo, Monte Cristi. El término de la licitación ocurrirá a final del próximo mes de junio con la adjudicación de las ofertas ganadoras.
Además, en enero del presente año se lanzó otra licitación de medio término también de 800 MW (LPI-EDES-003-2022), cuyo final y adjudicación está prevista para antes de septiembre del 2022.
En resumen, este gobierno está haciendo algo histórico en materia de generación eléctrica en el país, que es dotar a la nación de cerca de 2 mil nuevos megavatios de potencia que se instalará una parte en 2022, y el resto antes de finalizar el 2025 y 2026.
Con esa nueva capacidad se renovará nuestro parque de generación eléctrica y tendremos también por primera vez una capacidad adicional de plantas o reserva disponible para entrar en operación de inmediato, en caso de que alguna central salga de operación para reparación urgente o para mantenimiento menor o mayor rutinario.
Esa reserva se conoce como reserva fría del sistema y con estos planes rondará cerca del 15% de la demanda máxima anual.
A estas nuevas instalaciones de generación se les sumarán cientos de megavatios de origen solar y eólico que ya comenzaron a instalarse en todo el país.
Para respaldar y viabilizar toda esa nueva energía el gobierno ha iniciado a través de la Empresa de Transmisión de Electricidad Dominicana (ETED) un amplio plan de expansión de redes y subestaciones de alta tensión en las regiones sur, norte y este de la geografía nacional.
Ese tipo de planificación estratégica y de acciones concretas nunca las había realizado gobierno alguno en la República Dominicana.